Muchos profesionales independientes y emprendedores no lo tienen en cuenta, pero el desarrollo de la marca personal es un aspecto determinante a gestionar para diferenciarse de otros proveedores de servicios que buscan los mismos clientes. Gestionarla adecuadamente permitirá mejorar tus resultados.
Aunque no seas consciente de ello, al hacer una publicación, compartir un contenido, subir una foto o realizar un comentario en redes sociales, estás construyendo tu marca personal.
Esa huella digital que dejamos cotidianamente en diferentes canales de comunicación, está mostrando a otras personas:
- quiénes somos,
- qué tenemos para ofrecer al mercado,
- cuáles son nuestros intereses,
- qué posiciones tomamos en relación a temas puntuales,
- qué tipos de construcciones argumentales y análisis somos capaces de hacer,
- cuáles son las habilidades blandas que forman parte de nuestra personalidad.
Si no planificamos y ejecutamos estratégicamente cada una de las acciones que realizamos en espacios públicos de expresión, tendremos menos posibilidades de poder gestionar la imagen que proyectamos a los demás.
Por el contrario, asumir proactivamente nuestra marca personal, nos permitirá direccionar nuestros esfuerzos y cada una de nuestras participaciones en redes sociales, blogs o medios de comunicación, hacia un objetivo claro que esté alineado con nuestro desarrollo profesional.
La creación de una marca y su identidad visual es un factor clave para emprendimientos y empresas, pero también para las personas que gestionan esos proyectos u organizaciones. Es un proceso complicado, que implica llegar a un resultado que cautive a los potenciales clientes y con el que el público se sienta identificado.
Índice de contenidos
¿Qué es la marca personal?
Al igual que las empresas, las personas también tenemos nuestra propia marca, que se construye en el tiempo:
- teniendo en claro cuáles son nuestras fortalezas (para potenciarlas),
- reconociendo nuestras debilidades (con el objetivo de superarlas),
- sabiendo qué es lo que queremos o buscamos (cuáles son los objetivos que pretendemos alcanzar en el corto, mediano y largo plazo),
- visualizando aquello por lo que queremos ser recordados (nuestro legado).
Como señala Michelle Griffin tu marca personal, es tu esencia y tu reputación, lo que la gente piensa y dice de vos, incluso cuando no estás presente.
“La marca personal es una estrategia de marketing que personaliza y humaniza tu negocio, y te permite desarrollar relaciones sólidas”, explica, asegurando que cuando se la gestiona adecuadamente, atraerá a clientes.
Desarrollar una marca personal implica identificar los cuatro aspectos mencionados y comunicar cada una de nuestras características con el foco puesto en:
- sobresalir en relación a otros profesionales y competidores que ofrecen propuestas de valor similares a la nuestra,
- mostrar nuestra relevancia y sintonía con resultados y objetivos puntuales,
- diferenciarnos en un entorno homogéneo, competitivo y cambiante
- visualizarnos aprovechando los canales de comunicación disponibles en un contexto hiperconectado.
No es una tarea sencilla y exige dedicación, competencias para construir una visión estratégica y capacidades tácticas para ejecutarla.
Claves para gestionar tu marca personal
El secreto para trabajar tu personal branding de manera eficiente reside fundamentalmente en tu capacidad de generar valor en relación a la comunidad con la que te relacionás o pretendés hacerlo, y especialmente en función de tus potenciales clientes.
En la medida que puedas compartir información que sea útil para tu red, comenzarás a ganar en visualización y seguidores interesados en explorar tus contenidos.
Para ello es importante que quienes te leen, escuchan u observan, sientan que tus aportes los ayudan a transformarse, mejorar y crecer, y eventualmente inspirarlos.
A partir de allí, si conseguís viralizar conocimientos y experiencias relevantes, estarás cimentando tu capacidad de ejercer influencias positivas y construyendo tu prestigio profesional.
Tu marca personal, es tu esencia y tu reputación, lo que la gente piensa y dice de vos, incluso cuando no estás presente.
En su perfil de LinkedIn, Michelle Griffin, explica su método de trabajo para la gestión de una marca personal, denominado BrandThority™, el cual contempla 7 pasos esenciales:
1. Establecer tu propósito, valores, metas, misión y por qué tu aporte es importante.
2. Definir la audiencia exacta en la que pretendés impactar y construir comunidad.
3. Destacar tu historia personal y expresar un mensaje diferenciador.
4. Configurar las plataformas necesarias para comenzar a construir relaciones.
5. Desarrollar contenido para atraer clientes y partners de negocio.
6. Promoverte y mantenerte visible de manera constante.
7. Obtener y compartir resultados para amplificar tu credibilidad.
Por su parte, Dimitri Vieira, editor en Jefe del blog de la Comunidad de Rock Content, comparte 3 consejos para empezar a establecer tu marca personal:
1. Definir los objetivos que aspirás lograr y efectuar un análisis para evaluar si tu identidad está de acuerdo con la percepción que la gente tiene de vos. De esta manera, podrás empezar a tener una mejor idea sobre lo que necesitas exponer para establecer tu marca.
2. Crear un buen storytelling. La narrativa es fundamental. Contar tu historia es importante, pero también es importante vivirla. Trabajar tu marca de un modo que no sea genuino es la receta para el fracaso. No se trata solo de auto promoverte, sino utilizar tus propias experiencias para agregar valor a tu audiencia, enseñando algo nuevo o generando identificación personal.
3. Estar presente en forma activa en al menos una red social. Antes que tener una presencia intrascendente en varias redes sociales, conviene focalizarte en un comienzo en una de ellas. Para ello es imprescindible elegir la plataforma más adecuada a tus objetivos:
- LinkedIn: ideal para quienes se expresen con la palabra escrita, ya que plantea una exposición intelectual y no de imagen.
- Instagram: exige una participación más visual y dinámica.
- Facebook: es un mix entre lo textual y lo visual, y puede constituirse en un espacio propicio para replicar tus publicaciones en LinkedIn e Instagram, a partir de las cuales poder definir el formato y temperamento ideal para conectar con tu audiencia.

Para Vieira construir una marca personal efectiva está ligado a asumirte como quien sos realmente y proyectar esa identidad, sin tener miedo a ser diferente. “El mayor error que cometemos es quedarnos en término medio y no conectarnos de forma significativa con nadie. Tu público ideal te valorará por ser quien eres y ese es tu diferencial”, asegura.
En este sentido, su sugerencia es que seas claro en tu posicionamiento y en la comunicación de lo que aportas y lo que no entregas a tu público. Cuanto más claro, tu público más confiará en que entiendes su dolor y que eres la persona adecuada para ayudarlo.
10 errores que no debés cometer con tu marca personal (y cómo solucionarlos)
En un webinario organizado por Personal Branding Clubhouse, Leanne Calderwood analizó una decena de equivocaciones que pueden conspirar contra el desarrollo de tu propia marca profesional.
1) Las marcas personales no son sobre vos mismo, sino sobre cómo definirte o desarrollarte, y construir valor en relación a otros. O, como dice Dimitri Vieira, editor en Jefe del blog de la Comunidad de Rock Content, el personal branding no es sobre vos, sino sobre lo que la gente siente acerca de vos.
2) No conocer lo que te motiva: es crucial que identifiques y trasmitas tus valores fundamentales, tu visión y misión, y un mensaje sólido, para dar claridad y confianza a tu marca.
3) No ser conocido solo por una cuestión específica en relación a una audiencia puntual, o por un problema específico que resolviste. Esto genera confusión y hace que sea mucho más difícil destacarse.
4) Estar en demasiados lugares y plataformas a la vez. Es mejor mantenerse concentrado en una o dos plataformas primero, sin incurrir en lo mencionado en el punto anterior en cuanto a temáticas y audiencias.
5) No establecer metas ni definir métricas de resultados y éxito. Una marca personal bien gestionada debe estar vinculada a KPIs o indicadores claramente definidos.
6) No publicar contenido adecuado al ámbito en el que buscamos desarrollarnos, o no compartir y distribuir consistentemente contenido original. El contenido te define, atrae a tu audiencia ideal y es el combustible de tu marca.
7) No construir comunidad. Crecer solo es una utopía. Necesitamos que otros nos ayuden a difundir nuestro mensaje y misión.
8) Pensar que una marca personal no se aplica a vos mismo. Todos somos una marca, seamos trabajadores en relación de dependencia, emprendedores o profesionales independientes.
9) Crear una marca personal para obtener resultados instantáneos. Se trata de un “activo personal” que crece como el interés compuesto.
10) No recibir ayuda para construir la marca personal.
Dónde capacitarte
El Centro de e-Learning de la UTN te ofrece una interesante propuesta formativa en relación a la construcción de tu propia marca personal, pero también para que puedas asesorar a tus clientes a desarrollar una branding profesional sólido.
El Curso de Desarrollo Personal para Directivos ofrece la posibilidad de aprender a desarrollar marca personal en el entorno profesional, implementando herramientas de mindfulness y gestión de estrés.
2 comentarios
Para desarrollar y destacar en tu marca personal lo primero que tenemos que hacer es trabajar en ella antes de crear nada, analizar nuestra competencia, investigar lo que ya está hecho ver como podemos destacar, ver lo que no podemos hacer y una vez tengamos un plan perfecto empezaremos a crear nuestra marca.
¡Hola! ¡Muchas gracias por tu valioso aporte! Saludos.