En tiempos donde las reivindicaciones de derechos hacia las mujeres están en proceso de aceleración, los estudios de género permiten incorporar conocimientos y perspectivas que favorezcan la reducción y eliminación de las desigualdades que actualmente continúan favoreciendo a los hombres, a nivel social y laboral.
Si bien falta mucho camino por recorrer aún, la sociedad y las organizaciones están avanzando hacia una mayor igualdad y equidad de género. La sanción de leyes y la implementación de políticas corporativas orientadas a asumir este desafío, acompañan una tendencia que viene creciendo con fuerza.
A partir de este contexto, surge la necesidad de incorporar la perspectiva de género a la cultura de las organizaciones y desarrollar acciones de capacitación que lleven a comprender su dimensión e impacto.
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Estudios de género: ¿en qué consisten?
Como señala Rosa María González Jiménez, profesora e investigadora del Cuerpo Académico Estudios de Género en Educación de la Universidad Pedagógica Nacional (México), los estudios de género son un campo multi y transdisciplinar que analiza las relaciones sociales y culturales entre mujeres y hombres, y entre individuos del mismo sexo, entendiendo que el concepto mujer/hombre es una construcción social atravesada por relaciones de poder en un tiempo y lugar determinados.
En esta misma línea, Susana Gamba explica en el periódico especializado en el tema Mujeres en red, que la perspectiva de género, además de ser uno de los grandes aportes del movimiento feminista a la historia de la humanidad, implica reconocer esas relaciones de poder (en general asimétricas, al ser favorables a los varones y discriminatorias para las mujeres), que atraviesan todo el entramado social y se articulan con otras relaciones como las de clase, etnia, edad, preferencia sexual y religión.
Ampliando la descripción, Cecilia Luque, responsable del Programa Interdisciplinario de Estudios de Mujer y Género de Ciffyh, sostiene que en los estudios de género confluyen:
- contenidos,
- perspectivas teóricas,
- enfoques metodológicos de varias ciencias sociales y humanas
Al tener impacto en todos los ámbitos de actividad humana, la mirada de género no se tiene que entender dirigida solamente a las mujeres, sino que se requiere incorporar la perspectiva de género a la cultura de las organizaciones y desarrollar acciones de capacitación que lleven a comprender su dimensión e impacto.
Competencias necesarias para entender la problemática de género
Los procesos formativos de las organizaciones orientados a perspectiva de género deberían estar orientados a garantizar la comprensión de las siguientes cuestiones:
- Entender la construcción social de género como la configuración de una “lente” cultural para interpretar el mundo.
- Reconocer a la sociedad desde una perspectiva de género, observando las diferencias y semejanzas entre hombres y mujeres, y las desigualdades.
- Aprender a analizar la vinculación del género con la organización económica.
- Reconocer que nuestra identidad personal estuvo siempre asociada al género. Es decir: “no somos personas, somos hombres y mujeres”, con rasgos psicológicos de “feminidad” y “masculinidad”.
- Analizar y comprender el concepto de sociedad patriarcal.
- Comprender las demandas de cambio de las mujeres y los obstáculos que subsisten para solucionarlas.
En este sentido, Susana Gamba advierte que al tener impacto en todos los ámbitos de actividad humana, la mirada de género no se tiene que entender dirigida solamente a las mujeres, sino ampliarse a toda la comunidad.
De allí la importancia de capacitar en las organizaciones a todas las personas que forman parte de ellas para que adquieran las competencias necesarias.

Perspectiva de género en el ámbito laboral
En el marco del webinario ‘Mujeres en Operaciones’ que realizaron conjuntamente NUMAN y la Cervecería y Maltería Quilmes, María José Sucarrat, directora de la Red de Empresas por la Diversidad (RED) de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT), analizó diversos aspectos vinculados a la igualdad y equidad de género.
Durante su presentación se refirió a dos cuestiones centrales en las cuáles se debe trabajar para avanzar hacia la equiparación de oportunidades: reconocer la importancia del derecho que tienen las mujeres de acceder a puestos de trabajo bien remunerados, e identificar las barreras que tienen para lograrlo.
En este sentido Sucarrat, destacó tres indicadores que marcan diferencias entre hombres y mujeres:
1- Desigual participación en el mundo del trabajo.
2- La brecha salarial de género.
3- En la Argentina, 63% de las personas pobres son mujeres.
La expresión más aberrante de la desigualdad de género y de las relaciones patriarcales es la violencia que afecta a las mujeres por el solo hecho de serlo.
Violencia de género: un problema que requiere atención inmediata
La expresión más aberrante de la desigualdad de género y de las relaciones patriarcales (dominación de los hombres sobre las mujeres) es la violencia que afecta a las mujeres por el solo hecho de serlo.
Se trata de un problema en crecimiento, que debe ser abordado urgentemente, constituyendo un atentado contra la vida, integridad, dignidad y libertad de las mujeres, más allá del ámbito en el que se produzca.
Las características de la manifestación más brutal de las desigualdades entre hombres y mujeres, son las siguientes:
- cualquier acto violento o de agresión
- que se produce en el marco de un sistema de relaciones patriarcales
- puede tener como consecuencia un daño físico, sexual o psicológico, incluidas las amenazas de dichos actos, y la coacción o privación arbitraria de la libertad.
Una de las reacciones más contundentes a la violencia de género surgió en Argentina, y en el seno de sus corrientes feministas. La consigna ‘Ni una menos’ (2016), dio nombre a un movimiento y un colectivo de protesta contra la violencia hacia las mujeres y su consecuencia más visible y grave: el femicidio.
Cómo capacitarse en perspectiva de género
Si te interesa reflexionar sobre las asimetrías de género y sus implicaciones históricas, psicológicas, sociales, económicas, culturales y políticas; conocer la capacidad emancipadora del feminismo; adquirir mayor información en relación al problema de la violencia de género; o si tu organización necesita incorporar cursos sobre esta perspectiva, el Centro de e-Learning de la UTN.BA cuenta con interesantes propuestas:
1 comentario
Ahora todo es con perspectiva de genero…femenino. Mejor con perspectiva de persona.