En un mercado laboral complejo y signado por la reconversión profesional, adquirir competencias en HTML5 y CSS3 ofrece interesantes oportunidades de salida laboral.
Adquirir competencias informáticas permite mejorar los niveles de empleabilidad de las personas, no solo para aplicar a nuevos trabajos sino también para aspirar a mejores condiciones laborales en las organizaciones en las que se desempeñan.
Lo interesante es que para desarrollar este tipo de conocimientos no es necesario contar con estudios habilitantes previos, y el campo de oportunidad que abren es realmente importante.
De hecho, cada vez son más las empresas que valoran positivamente a los candidatos que poseen este tipo de habilidades, independientemente del puesto para el cual se están postulando. En algunos casos se trata de un requisito excluyente. Para profesionales independientes o free lance, incorporar esas aptitudes amplía sus posibilidades laborales.
Cada vez son más las empresas que valoran positivamente a los candidatos que poseen este tipo de habilidades, independientemente del puesto para el cual se están postulando.
Hace cuatro años, el informe ‘Competencias para un mundo digital’ del Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado (INTEF), se refería a las competencias necesarias para la economía digital, mencionando las siguientes:
1. Los trabajadores de cada vez más sectores laborales necesitan adquirir competencias TIC generales que les permitan usar esas tecnologías en su trabajo diario, por ejemplo, acceder a información en línea o usar diversos programas informáticos.
2. La producción de servicios TIC –software, páginas web, comercio electrónico, big data y aplicaciones en la nube– requieren habilidades TIC específicas para programar y desarrollar aplicaciones y gestionar redes.
3. El uso de las TIC está cambiando la manera en que se lleva a cabo el trabajo y aumentando la demanda de competencias TIC complementarias, como la capacidad de procesar información compleja, comunicarse con compañeros y clientes, resolver problemas, planificar con antelación y hacer ajustes de manera rápida.
En un marco de creciente demanda de capacidades digitales, adquirir competencias en HTML5 y CSS3 ofrece una salida laboral, tanto a nivel local como internacional, ya que en tiempos de pandemia y home office, contar con estos conocimientos vinculados al denominado ‘idioma de la web’, permiten ofrecer servicios profesionales en remoto.
De hecho, el curso online ‘Desarrollo web en HTML 5 y CSS3’ impartido por el Centro de e-Learning de la UTN.BA, permite en solo dos meses especializarse como desarrollador web en ambas tecnologías.
Como explica el coordinador del curso, Javier Kitainik, “HTML 5 (HyperText Markup Language, versión 5) es la quinta revisión importante del lenguaje básico de la World Wide Web, que establece una serie de nuevos elementos y atributos que reflejan el uso típico de los sitios web modernos”.
Adquirir competencias en HTML y CSS3 permite crear páginas web, gestionar blogs y programar aplicaciones.
Mientras que CSS3, cuyas siglas corresponden a ‘Cascading Style Sheets’, es muy usado para establecer el diseño visual de los documentos web e interfaces de usuario escritas en HTML.
Como señala Juan Diego Pérez Jiménez, “en la propia definición de CSS vemos que está muy ligado desde su nacimiento a HTML. Desde que nació, el objetivo de CSS fue poner un poco de orden a la hora de aplicar los estilos a las páginas web”.
¿Por qué son importantes HTML5 y CSS3?
Adquirir competencias en HTML y CSS3 permite crear páginas web, gestionar blogs y programar aplicaciones.
Desde Yeeply destacan que HTML5 es uno de los lenguajes que permiten el desarrollo multiplataforma, que se caracterizan por tener un solo código que es interpretado y ajustado a los diversos sistemas operativos, siendo prácticamente un sinónimo de aplicaciones web. Entre sus ventajas se destaca un desarrollo más extendido, implicar menos recursos y costes, consistencia de la interfaz de usuario y lanzamientos más rápidos.
CSS3 permite darle un aspecto único a la estructura de un sitio web y en este sentido actúa como complemento de HTML5. Entre sus módulos se destacan las animaciones y transiciones en CSS, uso de fuentes desde diversas librerías, layout con columnas y rotación de elementos. ¿Sus ventajas?: ser gratuito, contar con todos los estilos en una sola página y generar sitios más rápidos.